Traductor de griego antiguo (ha vertido al inglés a Eurípides y a Esquilo), Rex Warner ha cultivado la novela y la poesía con igual éxito. Nacido en 1905 en Inglaterra y educado en Wadham, Oxford, formó círculo literario con los poetas W.H. Auden y C. Day-Lewis. La obra El joven César le sitúa como un profundo conocedor de la antigua Roma, de las leyes y costumbres que allí se gestaron, y que han llegado hasta nuestros días.En el libro se narra de forma autobiográfica la juventud de Julio César, desde su adolescencia hasta los días previos de la Guerra de las Galias. Especial relevancia toman las ambiciones del joven Julio, así como las experiencias que vive como su relación con el cónsul Mario, su tio, en la guerra civil contra Sila, su cautiverio en el barco pirata que le raptó, o su tensa relación con los otros dos miembros del primer triunvirato, Craso y Pompeyo.
De vida desordenada y costumbres licenciosas, arruinado y endeudado hasta la última moneda y enfrentado a muerte con los enemigos de su familia, César dejó boquiabiertos y amedrentados a cónsules y senadores al tomar las riendas de Roma, cuando nadie podía ni quería esperar nada de él.
Description:
Traductor de griego antiguo (ha vertido al inglés a Eurípides y a Esquilo), Rex Warner ha cultivado la novela y la poesía con igual éxito. Nacido en 1905 en Inglaterra y educado en Wadham, Oxford, formó círculo literario con los poetas W.H. Auden y C. Day-Lewis. La obra El joven César le sitúa como un profundo conocedor de la antigua Roma, de las leyes y costumbres que allí se gestaron, y que han llegado hasta nuestros días.En el libro se narra de forma autobiográfica la juventud de Julio César, desde su adolescencia hasta los días previos de la Guerra de las Galias. Especial relevancia toman las ambiciones del joven Julio, así como las experiencias que vive como su relación con el cónsul Mario, su tio, en la guerra civil contra Sila, su cautiverio en el barco pirata que le raptó, o su tensa relación con los otros dos miembros del primer triunvirato, Craso y Pompeyo. De vida desordenada y costumbres licenciosas, arruinado y endeudado hasta la última moneda y enfrentado a muerte con los enemigos de su familia, César dejó boquiabiertos y amedrentados a cónsules y senadores al tomar las riendas de Roma, cuando nadie podía ni quería esperar nada de él.